• El PDA de Concón, Quintero y Puchuncaví, estableció que las empresas reguladas de la bahía deben contar con Planes Operacionales —que son revisados y aprobados por la Seremi de Medio Ambiente—. Estos contienen medidas operacionales específicas, destinadas a disminuir sus emisiones contaminantes, especialmente los días de Gestión de Episodios Críticos.

En lo que va de 2023, la Superintendencia del Medio Ambiente ya ha realizado 51 fiscalizaciones a los Planes Operacionales de las empresas del cordón industrial de Concón, Quintero y Puchuncaví. ¿La razón? El Plan de Prevención y Descontaminación Atmosférica (PPDA) para estas comunas establece que gran parte de los establecimientos regulados deben presentar una serie de medidas para el control y compensación de sus emisiones a la Seremi de Medio Ambiente de Valparaíso, que es la encargada de aprobar las propuestas presentadas por las empresas, mediante resolución fundada.

Los Planes Operacionales contienen una serie de acciones referidas al funcionamiento de una instalación, conforme a las características de sus procesos industriales. Estas acciones están destinadas a disminuir -durante el periodo de Gestión de Episodios Críticos- las emisiones atmosféricas de los contaminantes regulados por el Plan en forma inmediata, en condiciones de mala o regular ventilación, o en episodios de altas concentraciones de contaminantes.

Si bien en el año 2019 se establecieron los primeros Planes, durante 2020 se iniciaron las primeras actualizaciones correspondientes a las tres mega fuentes: Enap, Codelco y AES Andes. Posteriormente, por medio de la Resolución Exenta N° 11, del 10 de junio de 2022, de la Seremi de Medio Ambiente de Valparaíso, se dio inicio al procedimiento de actualización de todos los planes operacionales vigentes.

En total son 20 las empresas de la bahía que cuentan con Planes Operacionales, entre ellas: Codelco Ventanas; GNL; ENAP Aconcagua; AES Andes; ENEX; Oxiquim; ENAP Terminal Marítimo; Gasmar; Abastible y Copec.

Estas fiscalizaciones se realizan de forma presencial principalmente, a través de inspecciones en terreno. Sin embargo, también se llevan a cabo de manera remota mediante el seguimiento de las medidas operacionales que las empresas deben cargar periódicamente. En ambos casos se chequean las variables que se indican en cada plan, mediante medios verificadores que permitan constatar el cumplimiento o incumplimiento de las medidas.

“Los equipos de la SMA fiscalizan las medidas de estos planes operacionales, ya sea en terreno, o con información que recabamos mediante los sistemas de información digital que disponemos. Con esto, se verifica si se están cumpliendo las medidas que buscan reducir emisiones durante las declaraciones de período GEC”, explica Claudia Pastore, Jefa de la División de Fiscalización (S).