Las inspecciones buscan abordar denuncias ciudadanas, y a la vez, capacitar a profesionales de medioambiente de ambas casas edilicias en el marco de convenios de colaboración con la Superintendencia.
Santiago, 3 de junio de 2022. La jornada de ayer fue intensa en la fiscalización de ruidos en la Región Metropolitana. Durante la mañana, el equipo de la SMA concurrió a Quilicura a fiscalizar denuncias provenientes de ruidos de una construcción. En esa oportunidad, se concurrió a los domicilios de las personas afectadas para realizar las mediciones de decibeles junto a personal de dicha municipalidad.
En tanto, por la noche, un equipo de fiscalizadoras de la SMA concurrió a fiscalizar al barrio Bellavista, ante denuncias que se reciben por ruidos de distintos locales nocturnos. En la oportunidad, asistieron también profesionales de la municipalidad de Recoleta.
“En ambas fiscalizaciones asistieron profesionales municipales, ya que estamos realizando capacitaciones in situ, en el marco de convenios de colaboración que está firmando la SMA con distintas municipalidades para poder abordar la gran cantidad de denuncias por ruidos molestos que se reciben en el organismo, y que afectan sin duda la calidad de vida de las y los vecinos que deben enfrentar estos ruidos en horarios diurnos y nocturnos. Los municipios pueden ser grandes aliados, porque siempre la gente recurre en primer lugar a ellos, como primer paso de sus denuncias”, explica Claudia Pastore, encargada de la Sección Ciudad y Territorio de la División de Fiscalización y Cumplimiento Ambiental.
En cuanto a la gestión de denuncias, la SMA recibió casi 6.000 el año 2021, y de ese total, el 50% corresponde a temáticas de ruidos molestos. La Región Metropolitana lidera las denuncias de este tipo, asociadas a obras de construcción, locales nocturnos, centros de eventos, entre otros.